Bizcocho con uvas tintas

Hay fruta que está especialmente buena fresca, como las cerezas, los higos y las uvas. Pero tenía muchas uvas (de casa de M., de una parra preciosa) y ganas de tener buenos desayunos.

Las uvas son pequeñas, en racimos apretados y no se come la piel, porque es demasiado ácida. Yo las puse enteras, intenté endulzarlas dejándolas 24 horas en la nevera con azúcar.

Por eso busqué un bizcocho con arándanos por la red, pero pensando en cambiarlos por uvas. El bizcocho era a la vainilla y al final tampoco lo hice así. Cuando ya estaba manos a la obra descubrí un pastel de Jamie Oliver, una receta italiana. Se parecen.

Ingredientes de bizcocho con uvas tintas:

- 1/2k de uvas tintas

- 4 cucharadas de azúcar

- 400 gr de harina

- 1 sobre de levadura Royal

- 4 huevos

- 250 gr de azúcar

- 100 ml de aceite de oliva

- 150 ml de leche

- Un limón y una naranja (de mis padres, ecológicas por tanto)

Usé un molde rectangular de acero inox, de los de empanada. También usé la batidora, con el accesorio de batidor.

Tuve las uvas en azúcar un día entero. No parecieron coger demasiada.

Precalenté el horno a 170 grados.

Batí los huevos con el azúcar con la  batidora eléctrica, durante bastante rato (creo que cinco o seis minutos a máxima potencia) hasta que montaron y se pusieron amarillo pálido. Añadí el aceite y la leche y batí de nuevo un poco. Después añadí poco a poco la harina mezclada con la levadura, uniéndolo con una espátula. Al final añadí la ralladura del limón y de la naranja. Dejé reposar la masa un poco. Cuando se hacen estas masas a mano, observo que al reposar desaparecen las burbujas y muchos grumos de harina.

Preparé el molde con un poco de mantequilla y harina. Eché la masa y lo horné sólo 10 minutos. Distribuí las uvas por toda la superficie. Algunas se hundieron, otras no. Lo devolví al horno y lo dejé 40 minutos, hasta que estuvo dorado y cuajado del todo.

Crítica:

Mi horno es muy curioso. Reacciona mejor con bizcochos para los que uso los huevos enteros, en vez de con las claras montadas a punto de nieve. Debería ser al revés, pero no. Montar los huevos enteros (bien montados) y añadi luego la grasa, a mi horno le gusta. También salen bien los souffles y petit-choux. Este bizcocho salió bien. Las uvas dan un contraste fantástico, son ácidas pero a la vez recuerdan a las pasas ¡y al vino moscatel! Lo único un poco fastidioso son las pepitas.