Panellets o empiñonadas

 

 

Esta es una receta de El Aderezo. El problema (siempre veo alguno) es que los piñones son muy caros!!! El sobrecito de Borges de 60 gr cuesta algo más de 4 euros! Y para 24 empiñonadas necesitamos 120 gr.

 

Además llevan almendra, azúcar y un huevo. La almendra, si es posible, que sea marcona.

 

El robot, en mi caso My Cook, se usa para moler la almendra cruda. Lo demás hay que hacerlo a mano, pero al ser poca cantidad es llevadero.

 

Ingredientes para 24 panellets:

- 200 gr de almendra marcona cruda y molida

- 140 gr de azúcar

- 60 gr de agua

- 1 huevo

- 120 gr de piñones

 

Molí la almendra, velocidad progresiva 5-7-9. La aparté a un cuenco. Usé el vaso para pesar el azúcar y el agua.

 

Puse el azúcar y el agua en un cazo al fuego, hasta que el azúcar está disuelta y rompe a hervir. Eché la almendra molida de un golpe y removí con las barillas. Estuvo al fuego hasta que la masa se despegó de las paredes, 5-6 minutos, siempre sin dejar de remover.

 

La dejé templar y añadí la clara del huevo, removiendo con una espátula de madera. Eché la mezcla en un cuenco. Lo metí en la nevera. Debe estar 2 h, pero no pasa nada si está 1 h y luego un ratito en el congelador.

 

Puse a precalentar el horno a 200º. Esto es lo que da más pena, porque se utiliza unos minutos. Vale la pena organizarse y hacer varias cosas, por ejemplo otros dulces de Navidad: mazapanes, roscos...

 

Preparé la bandeja de horno con un papel. Cada empiñonada se hace con una bolita de masa (una cucharadita) un poco más grande que una canica, y se reboza en un platito de piñones. Se le vuelve a dar forma y los piñones quedan incrustados. Puse las bolas en la bandeja y las pincelé con yema de huevo. Se expanden un poco al cocer.

 

Con el horno a punto, puse la bandeja arriba. Se hornean sólo 6-7 minutos, deben quedar  dorados y brillantes por fuera, pero tiernos por dentro.

 

Crítica:

Están espectaculares, menos empalagosos que los comprados, y muy frescos y tiernos. Para amantes de los frutos secos, claro. Y eso que tuve un pequeño problema: sólo pude hacer la mitad, porque sólo tenía una bolsita de piñones. El resto de la masa la congelé. A ver qué pasa.