Empanada de manzana


La receta es de La cocina de lechuza, un blog estupendo, yo consulto muchas recetas gallegas.

No es literal: le añadí un tapón de anís a la masa, y en vez de azúcar moreno, espolvoreé la empanada con una mezcla de azúcar blanca y canela algo humedecidas. En la masa, también sustituí la mitad de la mantequilla por aceite, pero esto porque no tenía bastante.

Se puede decir que hay empanada de manzana en muchos sitios de España, y de Europa. Bueno, sí, pues en Galicia también. Sobre todo nas Rías Baixas.

Le puse la etiqueta de ropa vieja al usar dos tipos distintos de manzana, es decir, lo que tenía por casa: cuatro reinetas y dos golden. Una de las reinetas un poco pocha.

Pensé ¿hago una supergrande o la mediana? O sea ¿bandeja de horno o molde de quiche? Fui a lo grande. Cuando me pongo a hacer masas ya sé que lo que compensa es ir a por XXL.

Ingredientes:
- Para la masa: 520 gr de harina de trigo (yo usé harina de fuerza), 250 ml de agua, 100 gr de mantequilla, 1 cucharadita (de café) de sal, 3 cucharadas de azúcar, 25 gr de levadura de panadería fresca, 1 tapón de anís.
- Para el relleno: 6 manzanas, 2 cucharadas de azúcar, unos trocitos de mantequilla.

Cantidades para una bandeja de horno (30x45 cm aprox.)

La masa la preparé en la My cook: primero, puse en el vaso el agua, el anís, la mantequilla, la sal (muy importante en estas masas) y el azúcar, programé 1.5 minutos, 40º, velocidad 2. Luego eché la levadura y mezclé 10 segundos velocidad 5. Por último, la harina y 2 minutos velocidad amasado. Es un poco pringosa. La eché en un cuenco, se deja 1 hora para que leve. Sin el robot está bien explicada en el blog de La cocina de lechuza. Basicamente hay que hacer un volcán con la harina, y añadir el agua templada con la levadura disuelta, procurando que la levadura y la sal no tengan un contacto directo. Debe amasarse bastante rato, dicen que diez minutos (eso es una eternidad), al menos cinco.

Mientras pelé, descorazoné y corté las manzanas en trozos como para tortilla pero más gruesos. Los eché en un bol con dos cucharadas de azúcar y di unas vueltas de cuando en cuando.

Precalenté el horno a 180 grados y puse papel de horno en la bandeja.

Amasé un poco para desgasificar. Dejé reposar otros 10 minutos. Corté en dos. Estiré una parte hasta que quedó fina, lo más posible sin que se rompa. Aún así es frágil. Eché el relleno, distribuyéndolo. Puse puntas de mantequilla distribuídas por la superficie. Estiré el resto de la masa, tapé la empanada y retorcí los bordes. Abrí un agujerito en el centro.

Eché azúcar blanca y canela en un cuenco, mojé y distribuí por encima de la empanada.

Estuvo en el horno 35 minutos. La superficie queda bien dorada, con el azúcar seca y a medias caramelizada.

Crítica:
Es una receta sencilla, barata y "reconfortante": llena, no es demasiado dulce y tiene esa combinación familiar de sabores: manzana, anís, canela. Su aspecto es tosco, pero a la vez atractivo. Resulta perfecta para los desayunos.

Lo único es que la masa no es rápida de hacer, al contrario, las masas de empanada son bastante engorrosas, incluso con robot. Para mi gusto la tapa quedó un poco gorda, en cambio la base perfecta.

Ahora, para que sepa más a anís, el taponcito creo que hay que echárselo a las manzanas. Y es importante no quedarse corto con la sal.


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