Bizcocho enrollado con semillas de amapola (sigo con la thermomix prestada)

Esta receta es un poco exótica, por las semillas de amapola. Las compré hace tiempo (un año o así) para rellenar una cesta de productos de cocina de Internet, con la idea sana y práctica de probar esta receta polaca. Se llama strucla z makiem, y en su tierra es muy popular usar pasta de semillas de amapola, que ya venden preparada.

La receta la encontré en el foro de mundorecetas, está muy bien explicada. Yo la adapto a la Thermomix.

Ingredientes de bizcocho enrrollado con semillas de amapola:

Para la pasta de amapolas:

- 150 gr de semillas de amapola

- 25 gr de mantequilla

- 75 gr de azúcar

- 1 cucharada colmada de miel

- Aroma de vainilla (dos gotas)

- 40 gr de frutas confitadas (cáscara de naranja y otras) y almendras crudas (yo usé granillo)

Para la masa:

- 300-350 gr de harina de trigo

- 75 gr de mantequilla

- 1 huevo y dos yemas (pequeñas)

- 1 pizca de sal

- 75 gr de azúcar glass

- 25 gr de levadura fresca (una pastilla de Mercadona)

- 65 gr de nata líquida o leche fresca entera

Usé la Thermomix (ya lo he dicho cien veces) y un molde metálico para plum cake alargado.

Primero podemos fabricarnos el azúcar glass: se pone el azúcar en el vaso con las cuchillas, bien secos, y se tritura a velocidad progresiva hasta llegar a la máxima, durante unos segundos.

Sin quitar el azúcar del vaso, añadimos la nata y la mantequilla. Programamos un minuto y medio, 37 grados, velocidad 2 y 1/2.

Añadimos las yemas, el huevo y la levadura, por el bocal, sin necesidad de abrir el vaso. Mezclamos 10 segundos a velocidad 4.

Echamos la harina y la sal y programamos 15 segundos en velocidad 6, luego amasamos 2 minutos en velocidad espiga. Yo reservo 50 gr, y si veo que está demasiado blanda, la añado, amasando 30 segundos más.

Quitamos la masa del vaso y la dejamos reposar mientras hacemos el relleno. Esta masa es bastante pringosa. Cuesta sacarla del vaso.

Para la pasta de semillas de amapola necesitamos la Thermomix y medios tradicionales. Empezamos cociendo las semillas cubiertas de agua en un cazo durante 15 ó 20 minutos.

Escurrimos si quedó mucha agua y echamos en el vaso del robot, donde la trituramos 10 segundos. Como está caliente, creo no se debe triturar a velocidad muy alta (6-7 máximo). Se puede repetir si queda grueso. Tanto al cocer como al triturar desprende un olor raro a aceite. Normal, supongo, se trata de semillas. También cambia de color, volviéndose más grisácea.

Devolvemos la pasta al cazo, donde la mezclamos con la mantequilla, y dejamos que se tueste 10-15 minutos, moviendo para que no se agarre.

Echamos la pasta en un cuenco y la mezclamos con la miel, la fruta confitada, la almendra, y la esencia de vainilla. La esencia tiene sentido, porque el olor de la pasta no es muy apetitoso. Por lo menos para mí. Es raro. Dejamos enfriar.

Amasamos un poco la masa y estiramos hasta formar un rectángulo de 30x25 cm más o menos, no demasiado fino. La mesa y el rodillo deben estar bien enharinados.

Extendemos el relleno dejando 2 cm libres en cada lado largo, enrollamos y colocamos en un molde de plum cake forrado con papel para horno. Dejamos que suba la masa, al menos 30 minutos. Ponemos a precalentar el horno a 180 grados.

Pintamos con la clara mezclada con leche.

Horneamos entre 40 y 50 minutos, en mi horno con la bandeja abajo. Crece bastante. Para saber que está lo bastante hecho pinchamos con un palillo largo.

Crítica:

SABE A FLORES! Es increíble, pero sabe a las flores que ponen en las ensaladas, creo que son pensamintos, y algo a hierba, a los tallos de esas hierbas que chupan los niños. Un poco amargas, pero sin pasarse. En fin, que sabe a flores. Aunque un sabor bien envuelto en masa de brioche. Para desayunos de lujo.